El día que Alperovich-Amaya intentaron darle a Cristóbal López un predio del Parque para instalar 1.000 maquinitas

Viernes 23 de Marzo de 2018, 13:24

Cristóbal López, Domingo Amaya y José Alperovich



LA DECADA INFAME DE ALPEROVICH Y ROJKES

Jueves 23 de diciembre 2004

"Nos dijeron que comenzarán las obras en febrero, razón por la cual ahora están gestionando los permisos correspondientes en la Municipalidad (a cargo de Domingo Amaya), así como las demás autorizaciones".

Esto aseguró el ministro de Economía, Jorge Jiménez, al confirmar que la empresa Casino Club aceleraría la instalación de 1.000 máquinas tragamonedas en el predio del Hipódromo, en el Parque 9 de Julio.

Una vez que concluyan los trámites municipales y en la propia Caja Popular de Ahorros, la compañía que preside Cristóbal López (se lo liga al presidente Néstor Kirchner) podrá iniciar la ejecución de las obras en el Hipódromo. (N de la R: finalmente, frente a los obstáculos judiciales, las máquinas de Casino Club se instalaron en un predio de avenida Adolfo de la Vega).

El gobernador José Alperovich, por medio de un decreto, autorizó la posibilidad de que haya mejoras edilicias en el predio del parque 9 de Julio, cuya concesión en favor del Jockey Club la Caja Popular prorrogó por otros 20 años en octubre (vencía en enero de 2005).

Durante su corta intervención en la Caja Popular, tras la renuncia de Juan Carlos Veiga, Jiménez adjudicó a Casino Club, en forma directa aunque no exclusiva, la explotación de máquinas accionadas electrónica o mecánicamente, durante 20 años.

La empresa, a cambio, ofreció construir y donar a la Provincia un centro de convenciones, un hotel y una escuela en las 11 hectáreas del predio ubicado en avenida Belgrano y Camino del Perú, que pertenece a la institución crediticia oficial.

Lo único que queda por acordar es si la empresa concesionaria pagará un canon fijo o un porcentual por las 1.000 tragamonedas. Este punto deberá estar arreglado antes de que la firma comience a ejecutar las obras, a mediados de febrero. "Estamos estudiando las alternativas, pero elegiremos la forma más conveniente para la Provincia. Tenemos que ver cómo se da la situación ahora (con los otros concesionarios de máquinas de juego), pero, por sobre todo, teniendo en cuenta lo mejor para Tucumán", afirmó Jiménez.

Por las 850 máquinas habilitadas en la provincia, la Caja cobra un canon fijo de $ 375 mensuales para aquellas en las que sólo puede jugar una persona y de $ 600 para aquellas que pueden ser empleadas por varios jugadores ("multiplayers" se dice en inglés) al mismo tiempo.