El paleontólogo que más especies de dinosaurios descubrió llega a Tucumán

Jueves 19 de Abril de 2018, 11:56 | José Bonaparte disertará en la Fundación Miguel Lillo, en donde también trabajó durante años, este viernes a las 11.00. Un autodidacta que se convirtió en referente de la Paleontología y descubrió nada menos que el "Argentinosaurus".

José Bonaparte, un icono de la Paleontología, disertará este viernes en la Fundación Miguel Lillo.



José Bonaparte apenas terminó la primaria. Cuenta en varias entrevistas que trabajó de peón de albañil, vendió nafta, fue carpintero y hasta manejó camiones. Recuerda también que a sus 16 años, mientras trabajaba en una Estación de Servicio, iba mucho a la Iglesia para participar de las reuniones de la Juventud Católica Obrera y le llamó la atención el adoctrinamiento. Eso disparó un cuestionamiento y ese cuestionamiento lo llevó hasta el libro de Darwin "El origen de las especies", el cual lo marcó y lo hizo interesarse por el pasado. Tanto se interesó que a sus 19 años ya había extraído tantos fósiles de las barrancas de los ríos que fundó –con un puñado de amigos– el Museo de Ciencias Naturales Carlos Ameghino, en Mercedes (Buenos Aires).

Este maestro -paradigma del autodidactismo- que pese a ser rosarino y vivir en Mercedes, estuvo cerca de 20 años en Tucumán trabajando en el Lillo, descubrió nada menos que el Argentinosaurus, el dinosaurio hervíboro más grande hallado en América del Sur, y es el paleontólogo contemporáneo que más dinosaurios descubrió en el mundo (23 especies).

La Fundación Miguel Lillo tendrá el honor de recibirlo en su casa, en donde dictará la conferencia "El origen de los mamíferos", tema que -según sus propias palabras- es el que más lo apasionó en los últimos 20 años
. La cita (abierta al público) es este viernes 20/4 a las 11.00 en el microcine de la institución (Miguel Lillo 251). La charla fue organizada en conjunto con Facultad de Ciencias Naturales.

Su huella en Tucumán

Tras muchos años de estudio y trabajo que le valieron reconocimiento mundial en el ámbito científico, en 1959 se incorporó al Instituto Miguel Lillo de la Universidad Nacional de Tucumán, donde fue profesor titular de Paleozoología y director de la Sección de Paleovertebrados. Bajo su dirección, esta sección alcanzó una jerarquía notable, no sólo por los excepcionales materiales que se reunieron sino también por los numerosos trabajos que se publicaron. En 1974 dicha casa de altos estudios le otorgó, previa consulta internacional, el título de doctor honoris causa. En el año 1978 decidió dejar el Instituto Miguel Lillo y trasladarse a la ciudad de Buenos Aires para tomar la dirección de la Sección de Paleontología de Vertebrados del Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia (MACN). Llegó a investigador superior en el Conicet, publicó 150 artículos de investigación y 6 libros. Fue becado por la National Geographic. En 2008 lo premió la Society of Vertebrate Paleontology de EE.UU.