Cuando se trata de granitos en la llamada ’zona T’, es decir, el entrecejo y la frente, el responsable suele ser también el estrés. La única manera de evitarlos si sabemos que vamos a tener una semanas complicada es mantener una buena higiene del rostro e incluso plantearse usar algún tratamiento antiacné de manera preventiva. También se asocian los granos en la frente, sobre todo en la parte superior de la misma, con problemas digestivos asociados a una mala dieta. Elimina la comida basura y verás mejorar el aspecto de tu piel. También ayuda beber mucha agua.
La línea del pelo:
Cuando los
granitos se concentran en el nacimiento del pelo, en la línea entre el
cuero cabelludo y el resto del rostro, lo que tienes que revisar son los
productos que empleas para la limpieza del cabello. Puede que tu champú
sea demasiado agresivo o te esté ocasionando una reacción alérgica. Más
aún si empleas lacas o productos fijadores. Prueba con otras marcas,
lava bien la zona, y si aún así el problema persiste visita a un
especialista.
La nariz:
Los granitos en la nariz se asocian con problemas del aparato circulatorio. Vigila una vez más tu alimentación e introduce alimentos que puedan mejorar este sistema, como la cebolla y el ajo. También te ayudará reducir las carnes rojas y las comidas muy picantes.
Las mejillas:
Los granos en las
mejillas pueden tener un origen interno o externo. Origen externo: este tipo de granos
se relaciona con nuestra propia suciedad diaria. Tocarnos a menudo con
las manos después de estar escribiendo o hablando por el teléfono móvil sin
que éste esté muy limpio. Cuando los granos son fruto de disfunciones
internas el hecho de que aparezcan en las mejillas está relacionado con
problemas respiratorios. En la parte baja pueden tener que ver con
problemas bucodentales. Consulta con un especialista.
Cuando las espinillas salen
alrededor de la boca, además de la suciedad, el motivo suelen ser las
comidas. Los ácidos pueden irritar las comisuras de los labrios, lo
mismo que si comes alimentos muy aceitosos y luego no te limpias bien la
grasa puede taponar los puros y hacer que salgan los molestos granos.
Cuello, espalda:
Más allá del rosto, cuando los granos y espinillas salen de pronto en el cuello o en la espalda, es posible que tengas que revisar los tejidos de tu ropa. Prueba con tejido cien por cien de algodón para evitar reacciones alérgicas. Éstas son más comunes de lo que puedes suponer.